jueves, 21 de octubre de 2010

La fan perfecta

Necesitas pasar mucho para saber qué es el amor. No tenemos lo que de verdad queremos, pero las cosas pequeñas significan lo suficiente. Hay muchas jugadas realizables. No pasa un día en el que no piense en ti. Siempre estás ahí para mí, me empujaste y guiaste, siempre con éxito. Me enseñaste, cuando era pequeña, a crecer. Me enseñaste todo lo que había que saber. Me enseñaste a caminar sin la ayuda de tus manos. Porque, mamá, tú siempre serás la fan perfecta.
Dios ha sido muy bueno por bendecirme con esta familia. ¿Quién ha hecho lo posible para que tuviera estos preciosos años? Me encanta ver cuando sonríes. Quiero agradecerte todo lo que has hecho por mí, siendo la hija perfecta. 
Me enseñaste a amar, a cuidar. Quiero agradecerte todo el tiempo que has empleado en mí. Estoy orgullosa de decir que eres mía. Porque, mamá, tú siempre serás la fan perfecta.

viernes, 1 de octubre de 2010

Espero que llegue...

Toda la culpa es mía. O de más gente, no sé. Tú lo intentas, yo no. Y lo siento mucho, no tanto para disculparme sino para decirte que te necesito. Que tú eres lo que me hace falta. Eres quien me llama, me alegra, me lo dice de verdad... eres quien me quiere. Pero tengo que admitirlo: soy tonta. Busco que el resto pueda compararse a ti, que todos me den tu amistad, pero nadie lo consigue. Unos con sus cosas, otros con otras, y tú eres la única que de verdad puedo decir que me quiere, o, al menos, la única que me quiere sin pedir ese afecto a cambio.
Me gustaría cambiar, volver a verte todos los días, porque tú maduras cada segundo y yo me tengo que sentar y pensar si tiene lógica las cosas que vivo. Quizás sea arriesgado decirte que te quiero, pero sí puedo decirte que me falta tu amistad.