lunes, 8 de junio de 2009

*Eco de una redacción*

Entonces sontió que una cabeza se cruzó en tre su cara y la pantalla del ordenador. La miraba fijamente. Ella hizo lo mismo.
-¿Qué?
-Déjame el ordenador un rato, por favor -era su tío, una persona que no parecía mayor que ella, aunque lo era. Y por una larga diferencia.
-No, tú lo tienes siempre, además, el abuelo me lo ha prestado a mí.
-Sólo será un momento. Por favor -puso carita de cordero degollado, algo a lo que ella aún no se podía resistir.
-Voy a buscar a...
-¿A tu novio? -le cortó él.
-Sí, al mismo. ¿Lo has visto? ¿Dónde está?
-Se han ido. Hace una rato que estamos solo tú, tu tía y yo en casa. ¿No lo habías notado? Sería demasiada casualidad que todos estuvieran callados en el mismo momento. Jaja -el chico se echó a reir, puesto que sabía que en su familia eran todos muy callados.
-Entonces, ¿no puedo irme a casa? -vió que su tío negaba ferozmente con la cabeza. - ¿Esto es un secuestro? -volvió a escuchar una carcajada de su tío, que la levantó de la silla para adueñarse del ordenador.
En ése momento la puerta se abrió. Al otro lado del umbral estaban: su novio, sus padres, sus abuelos y sus otros dos tíos. Corrió hacia la puerta.
-No me volváis a abandonar con la cosa ésa, y menos en la misma casa -dijo señalando a su tío, el mismo que le había robado el ordenador. Ahora se refería sólo a su abuelo. -Me ha robado el ordenador, ¿a que me lo había prestado a mí?
El hombre al que se dirigió, que tampoco parecía muy mayor, se rió ampliamente.
-Tanto cuerpo y tan poca madurez... -dijo. El muchacho que se hallaba en el ordenador empexzó a reirse. -también va por ti, hijo. De esta no te libras -el chaval del ordenador miró con indiferencia a su padre.
La chica, sus padres y su novio, salieron de la casa y se dirigieron hacia otra casa, la suya.
-¿Tan mal se ha portado contigo? -dijo su padre entre carcajadas.
-¡Me ha quitado el ordenador! Y estaba haciendo una cosa muy importante -dijo a su padre, quedando por encima de él y se fue a su habitación. Su padre sabía perfectamente qué había estado haciendo, pero era una persona en la que se podía confiar.
Una vez estuvo arriba, encontró a este chico con el que llevaba cuatro años saliendo.
-¿Y puedo saber qué estabas haciendo, tan importante?
-Nada, ¿quién te ha dicho que estuviera haciendo algo importante que no puedes sabes porque lo arruinaría todo, en el ordenador?
-En verdad todo eso m lo acabas de decir tú -se le había ido la lengua a la chica, y quizás él supiera que estaba preparándole un viaje inolvidable.
-¿Y te lo vas a creer todo?
-Siempre me creo lo que tu me dices, amor. ¿Qué es eso que no puedo saber?
-No lo puedes saber -dijo la chica, pícara.
Él la miró. Lo estaba provocando y ella lo sabía. La siguió con ingenuidad hasta su cuarto, cerró la puerta tras de sí y volvió a preguntar.
-¿Seguro que no puedo? ¿Ni un poquito? -ella le negaba, con una sonrisa en la cara. Se acercó a él -Un poco, por favor. Si no se va a enterar nadie...
Se aproximaron más. Casi ni el aire podía pasar entre ellos. Y su viaje no había aún comenzado...
[...]


*Eco de una redacción.

3 comentarios:

Gemi dijo...

k way patri k romantikooooooooooooo k ijo puta el tio joe k kabron k ganas d molesta k monos ellos dos en el cuarto y ella k mona preparando el vioaje, esta to way preciosa bsss

Nuria dijo...

no me gusta ¬¬ no me he entearo mu bien cuando hablan los personajes

[---Er Luii---] dijo...

Esta guay,que chulo el tio chorizo que le roba el ordenatta xdxd ¿esto es una historia que vas a seguir escroibiendo?¿o es una cosa asi,sin sentido? te quiero niety